PRIMER DÍA

 

Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Derrama, Señor, sobre nosotros la fuerza del Espíritu Santo, para que podamos cumplir fielmente tu voluntad y demos testimonio de ti con nuestras obras. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Vuestro Padre celesial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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SEGUNDO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Te pedimos, Dios de poder y misericordia, que envíes tu Espíritu Santo para que, haciendo morada en nosotros, nos convierta en templos de su gloria. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Dejad que el Espíritu renueve vestra mentalidad y vestíos de la nueva condición humana, creada a imagen de Dios, justicia y santidad verdaderas.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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TERCER DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Padre lleno de amor, concede a tu Iglesia, congregada por el Espíritu Santo, dedicarse plenamente a tu servicio y vivir unida en el amor, según tu voluntad. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Dios nos ha salvado con el baño del segundo nacimiento y con la renovación por el Espíritu Santo; Dios lo derramó copiosamente sobre nosotros por medio de Jesucristo nuestro Salvador.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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CUARTO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Señor, Padre Santo, Dios fiel, que enviaste el Espíritu Santo prometido para que congregara a los hombres que el pecado había disgregado, ayúdanos a ser, en medio del mundo, fermento de unidad y paz. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión El Espíritu de la Verdad, que procede del Padre, dará testimonio de mí; y también vosotros daréis testimonio.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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QUINTO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Señor Dios, que por la glorificación de Jesucrito y la venida del Espíritu Santo has abierto las puertas de tu reino, haz que la recepción de dones tn grandes nos mueva a dedicarnos con mayor empeño a tu servicio y a vivir con mayor plenitud las riquezas de nuestra fe. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión El fruto del Espíritu es: amor, alegría, paz, comprensión, servicialidad, bondad, lealtad, amabilidad, dominio de sí. Si vivimos por el Espíritu, marcharemos por el Espíritu.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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SEXTO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Dios todopoderoso, brille sobre nosotros el explendor de tu gloria, y que el Espíritu Santo, luz de luz, fortalezca los corazones de los regenerados por tu gracia. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión El espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad porque nosotros no sabemos pedir lo que nos conviene, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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SÉPTIMO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Señor Dios, Padre todopoderoso, infúndenos la luz del Espíritu Santo para que, libres de toda advrsidad, podamos alegrarnos siempre en tu alabanza. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Esforzaos por mantener la unidad del Espíritu Santo, en el vínculo de la paz. Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la meta de la esperanza en la vocación a la que habéis sido convocados.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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OCTAVO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Señor, tú que edificas el templo de tu gloria con piedras vivas y elegidas, multiplica en tu Iglesia los dones del Espíritu Santo para que tu pueblo, Cuerpo creciente de Cristo, llegue un día a transformarse en Jerusalén nueva y eterna. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Dios es quien nos confirma en Cristo a nosotros junto con vosotros. Él nos ha ungido, Él nos ha sellado y ha puesto en nuestros corazones, como prenda suya, el Espíritu.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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NOVENO DÍA

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Invocación Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Oración Señor Dios, tú que has preparado el corazón de la Virgen María una digna morada al Espíritu Santo, haz que nosotros, por intercesión de la Virgen, lleguemos a ser templos dignos de tu gloria. Por Cristo Nuestro Señor.

Reflexión Los que se dejan llevar por el Espíritu de Dios son hijos de Dios. Habéis recibido, no un espíritu de esclavitud para recaer en el temor, sino un espíritu de hijos adoptivos que nos hace gritar: ¡Abba!. ¡Padre!.

Medita; pide al Espíritu Santo sus 7 dones y la gracia especial que deseas y reza el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración final Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, te adoro, ilumíname, guíame, fortifícame, consuélame, dime qué debo hacer, ordéname. Te prometo someterme en todo lo que quieras de mí, y acepto todo lo que permitas que me suceda. Hazme solamente conocer tu voluntad.

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