PRIMER VIERNES

en que pedimos a este Amor divino, nos conceda el Don de la SABIDURÍA

 

Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno Su gracia, el Santo Espíritu, nos remita y conceda, con que divina sombra hizo a la Virgen reina. Cuando el celeste arcángel la saludó, y en ella, el Verbo de hizo hombre, concibiendo doncella.

Antífona Ven, Espíritu Santo y llena los pechos de tus fieles y enciende el fuego de tu Amor en ellos, comunicándonos el don de la divina SABIDURÍA.

V/ Envíanos tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra tierra.

ORACIÓN Divino Espíritu Santo, amor inmenso espirado por la voluntad del Eterno Padre, y el inmenso Hijo: que fuiste artífice soberano, que nos condujo al mundo en la Nave Santa María la SABIDURÍA INCREADA el omnipotente Verbo. Nosotros os suplicamos humildemente por esta vuestra maravillosa obra (principio de nuestras dichas) nos comuniquéis un rayo de vuestra luz, que nos infunda la verdadera SABIDURÍA, que consiste en amaros en esta vida caduca, para gozaros por infinitos siglos en la eterna. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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SEGUNDO VIERNES

en que suplicamos a este Amor divino, nos dé el necesario Don de un claro ENTENDIMIENTO

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno De María, Virgen pura, Nació por nosotros Cristo, Murió en la cruz, y el sepulcro, Tres días le vio en su abismo. Mas resucitando hermoso Apareció a sus amigos Y triunfando de la muerte, Subió a su vista al Empíreo.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don de ENTENDIMIENTO.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra tierra.

Divino Espíritu Santo, omnipotente Dios y Señor nuestro, pues soy la verdadera y clara luz de las almas, nosotros os suplicamos humildemente, por este atributo excelso, nos participeis una estrella de esta luz soberana que aclare nuestro ENTENDIMIENTO inflamando a la voluntad, a verdadera y puntual observancia de la divina Ley co que conservemos la joya de la Gracia , y aseguraremos amaros por toda la eternidad en la Gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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TERCER VIERNES

en el que suplicamos al Espíritu Santo, nos conceda el utilísimo Don del CONSEJO

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno Dignose el Padre Eterno de enviar, Para alivio del Colegio sagrado, Su Espíritu Divino Incendios visten el aire Y sus pechos heridos de Ardor celeste, truecan la pena en regocijo.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don del CONSEJO.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra.

ORACIÓN Divino Espíritu, mutuo consustancial Amor del Padre e Hijo, pues sois verdadera paz de las almas, nosotros os suplicamos, humildemente, por esta noble excelencia, nos comuniquéis vuestra gracia, que engendre en nosotros la perfección de un maduro CONSEJO, para que con él procediendo en todas nuestras obras consigamos el acierto que nos asegura la quietud y paz de nuestras almas, con que conseguiremos la tranquilidad eterna de la Gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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CUARTO VIERNES

en que suplicamos a este Divino Espíritu, nos conceda el Don de una invencible FORTALEZA

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno Los siete dones, entonces, De este Espíritu recibenY tantos idiomas hablan, Cuantos el sol cuenta y mide. Ya el nombre de Cristo suena, En cuanto la Tierra ciñe En Asia, África y Europa América y Tierra firme.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don de la FORTALEZA.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra tierra.

ORACION Divino Espíritu Santo, suave eterno rocío del Cielo, enviado para común consuelo de afligidos: pues bajasteis en representación de misteriosas lenguas de amoroso fuego, con que fortalecisteis, confirmando en la gracia a los del Colegio Apostólico. Nosotros os suplicamos, humildemente, que por este gran favor encendáis en nuestras almas el fuego de vuestro Amor. Que nos de una invencible FORTALEZA en la gracia para resistir la tentación de la culpa y asegurar el veros por toda la eternidad, donde vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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QUINTO VIERNES

en que pedimos al Espíritu Santo, nos conceda el Don de una verdadera CIENCIA

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno Si Consolador te llamas, Y Don de Dios a los hombres Si en helados pechos crias, Abrasados corazones Si Origen eres y Causa, De gloria a los pecadores Y unión celeste que abanda Endurecidos errores Si fuego amoroso Y padre De siete altísimos dones Logre yo el fruto;Señor De tan soberanos nombres.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don de la CIENCIA.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra tierra.

ORACIÓN Divino Espíritu Santo, innata fuente de la Gracia , pues en el Jordán bajasteis, como Paloma cándida a publicar las grandezas de Cristo, nuestro Señor, os suplicamos humildemente,, por esta santa demostración de fineza, nos inflaméis en vuestro Amor, para que nos infunda el Don de una verdadera CIENCIA que nos gui por el camino de la verdad, hasta ponernos en el deseado puerto de la Bienaventuranza , donde perfectamente conoceremos vuestra excelente grandeza por toda la eternidad. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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SEXTO VIERNES

en que pedimos a este soberano Amor, nos participe el caritativo Don de una amable PIEDAD

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno El Espíritu Divino, Virtud, Mano y Fortaleza de Dios Nos libre del riesgo Que a muerte del alma condena Porque altamente asistidos De su sombra y su defensa No nos venza el ángel fiero Que horrores y sombras cercan.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don de la PIEDAD.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra.

ORACIÓN Divino Espíritu Santo, Esposo dignísimo de la purísima Virgen, pues sois recíproco amor de Padre e Hijo, nosotros os suplicamos humildemente, por esta noble excelencia nos participéis vuestra gracia, que nos cause una mutua PIEDAD con lo prójimos a para que amándonos con fineza unos a otros, participemos del virtud de todos que nos facilitarán la consecución de la Gloria , donde vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

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SÉPTIMO VIERNES

en que pedimos al Espíritu Santo, nos conceda el Don del santo justo TEMOR DE DIOS

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Acto de contrición Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío: por ser vos quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosa, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Ayudado de vuestra Divina Gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

Hecho el Acto de contrición, se hará la petición siguiente todos los viernes.

PETICIÓN Todopoderoso Espíritu Santo, Espíritu bueno, Esposo consolador, Espíritu manso que, por vía de voluntad, inefablemente procedes del Padre, y del Hijo y con vínculo estrechísimo de Amor los unes entre sí. Ven, Padre de pobres, dador de los bienes, Consolador bueno, Fuente de agua viva, dulce refrigerio, Luz beatísima, Amor purísimo, Amor castísimo, Amor fragantísimo: Ven Espíritu Divino, que en el día santo de Pentecostés descendiste sobre los Apóstoles, y llenaste aquellos sagrados pechos de caridad y gracia, y sus entendimientos de celestial sabiduría. Ven, Señor a mí y envíame de lo alto un rayo de tu lumbre que me encienda en tu perfecto Amor. Ea, Señor, infunde tu llama en mi corazón y esfuerza con tu virtud mi gran flaqueza. Enséñame, Dios mío, gobiérname, dadme fe recta, esperanza firme ,y caridad perfecta. Alumbra, Amor divino, a los que están en pecado mortal, para que salgan de tan miserable estado, reduciéndolos a verdadero arrepentimiento, y dadme vuestra gracia para que nos os ofenda, y tu gratísima voluntad en mi siempre se cumpla, y me sea sumo consuelo, que con el Padre, y el Hijo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Se rezará siete veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Se dirá luego:

V/ La gracia del Espíritu Santo ilustre nuestros corazones y sentidos.

R/ Amén.

V/ Señor abriréis mis labios.

R/ Y mi voz pronunciará vuestra alabanza.

V/ Dios mío, mi defensa te encomiendo.

R/ Señor a mi socorro acude presto.

Gloria sea dada al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Por los siglos de los siglos. Amén.

Himno Consuelo de afligidos Alivia nuestras penas Gobierna nuestras obras Y alumbra nuestras huellas Porque el último día De rigurosa cuenta Aquel Juez supremo Nos coloque a su diestra.

Antífona Ven, Espíritu Santo, y llena los pechos de tus fieles, y enciende el fuego de tu Amor en ellos, y danos el necesario Don del TEMOR DE DIOS.

V/ Envíanos, Señor tu Espíritu, para que nos criemos en tu Amor.

R/ Y darás nueva hermosura a nuestra.

ORACIÓN Divino Espíritu Santo, y eterno Don del Altísimo, pues sois Tercera Persona de la Trinidad beatísima, y una misma esencia con Padre e Hijo Omnipotente, nosotros os suplicamos humildemente por esta inefable excelencia nos comuniqueis vuestro amor que inflame nuestras almas en un santo justo TEMOR de DIOS, para con él perfeccionar nuestras obras en esta vida y disponernos para la visión clara de Vos mismo con el eterno Padre y su consustancial Hijo por todos lo siglos de los siglos. Amén.

Luego tendrá un rato de meditación, pidiendo al Espíritu Santo lo que desea conseguir: y acabará con el Alabado sea el Santísimo etc.

Alabado sea el Santísimo Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar. Sea por siempre bendito y alabado.

Padre Nuestro Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria Patri Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

También se puede decir después del Himno, en lugar de la Antífona y versos dichos lo siguiente

Antífona Hodie completi sunt dies Pentecostés, aleluya: hodie Spiritus Sanctus in igne discipulis apparuit: et tubuit eis carismatum Dona: misit eos in universum mundumpredicare, et testificari: qui credideri et baptizatus fueris salvus erit, aleluya.

V/ Loquebantur variis linguis Apostolis, aleluya.

R/ Magnalia Dei Aleluya.

ORATIO Deus qui hodierna die cordsa fidelium Santi Spiritus ilustratione docuisti; da nobis in eodem Spiritus recta sápere et ejus semper consolatione gaudere Per Dominum Nostrum Jesum Cristum.